Difícil de calificar lo que vivió el SD Espanyol este viernes en la pista del CH Lloret. Y es que con un parcial de 1 a 4 a 18 minutos del final, y con el partido relativamente controlado, el arbitraje le dio la vuelta al partido hasta llegar al resultado final de 5 a 4. Decía aquel lo de «que se vea el efecto sin que se note la intención» y aquí se vio el efecto y si no la intención, como poco la predisposición.
Cualquiera puede ver el vídeo del partido y notar como las decisiones arbitrales en la segunda parte, con 2 tarjetas azules y dos penaltis muy difíciles de justificar, a excepción de la segunda tarjeta azul, son decisivas y tendenciosas en el desenlace del partido.
Este era un partido muy importante, casi decisivo, para las aspiraciones del Espanyol a optar a plazas de ascenso. Queda aún margen, más que suficiente, con las cosas un poco más difíciles, pero estamos convencidos del potencial de este equipo, y su espíritu de lucha. Adelante y a por todas en los próximos partidos.